Seguro que estáis cansados de escuchar que los monstruos no existen, pero eso no es del todo cierto.
El protagonista de este libro nos cuenta que desde que es pequeño ha tenido a un monstruo a su lado. Quizá naciera a la vez que él o quizá llegase cuando empezó a hablar, eso no lo sabe seguro pero sí que sabe que cada vez que quiere hacer algo el monstruo lo impide. Es demasiado grande y a veces sólo puede verle a él.
Muchas veces ha querido que su madre, su hermano o su padre se lo lleven, que hagan que se marche, pero cuando ellos llegan el monstruo se esconde y nadie más le ve. Pero la verdad es que sigue ahí.
La historia nos enseña muchas ocasiones en las que el protagonista se queda sin jugar, sin salir a la calle o incluso sin dormir porque sólo ve a su monstruo, lo tiene delante de la puerta o no deja de roncar.Pero un día, la cosa va más allá, el monstruo aparece en el colegio, un lugar que siempre había sido seguro para nuestro protagonista, y lo está esperando a la salida. Ese día el monstruo estaba de muy mal humor, y era más grande que nunca. Por más que lo intentó, no pudo despistarle.
Ese día, el monstruo le siguió hasta casa de su abuela, quien al verle llorando y preocupado, le preguntó qué le pasaba.
Su abuela le escuchó mientras él le contaba que ese monstruo nunca se iba a marchar, que nunca le iba a dejar tranquilo y, de repente, el monstruo paró de hacer lo que estaba haciendo y se puso también a escuchar, y mientras escuchaba se fue haciendo cada vez más y más pequeño.
En ese momento, nuestro protagonista supo que podía hacer que se marcharse, aunque al día siguiente al verle en el cole tan perdido decidió meterlo en el bolsillo, ya no le tiene miedo, es verdad, pero sigue siendo su monstruo y le acompaña a todos los sitios. Eso sí, si alguna vez quiere salir nuestro niño, le pide que se porte bien.Como veis es una maravilla de álbum con un mensaje super importante. Creemos que desarrollar un entorno seguro en casa o en las clases es fundamental para que los niños y las niñas sepan que pueden hablar de las cosas que les dan miedo o les preocupan. Todos tenemos monstruos y negar que existen no hace más que empeorar las cosas.
El niño refleja muy bien las diferentes emociones que vive en las situaciones cotidianas que se representan en el álbum y hay también alguna escena con sombras del monstruo muy acertada.
Las guardas del libro nos enseñan a un monstruo gigante que se asoma ocupando la mayoría de la página derecha y al final un monstruo pequeño con la lengua fuera en la esquina inferior derecha. Algo que sin duda representa la evolución de la historia y que es uno de esos detallitos que nos gusta.
Si os animáis a tener este libro en vuestras casas o aulas, podéis pasar por la Libroteca a por él o pedirlo desde nuestro formulario web.
El PVP es de 15€
